A un poco más de dos semanas de concluir este sombrío 2020, no todo es oscuro en nuestra naturaleza es nefasto, también puede ser un gran espectáculo como el ECLIPSE TOTAL DEL SOL que tendrá lugar hoy y cuenta a Chile y Argentina como lugares privilegiados en el mundo para poder apreciarlo (por cierto, Perú, Bolivia, Uruguay y Brasil se lleva el segundo lugar).

Para no perdernos nada sobre este gran acontecimiento astronómico, y por un momento dejar de lado las sombras de nuestra política o la realidad COVID – 19 y la inminencia de una segunda ola, a continuación, se dará respuesta a: ¿QUÉ ES UN ECLIPSE?, ¿CUÁNDO OCURRE? ¿QUÉ IMPORTANCIA TIENE? y, sobre todo: ¿CÓMO Y CUÁNDO VERLO?

Fue en el año 1919, cuando Sir Arthur Eddington un famoso astrofísico británico de su época, muy amigo de Einstein y súper fan de la teoría de la relatividad comanda una expedición a la isla del Príncipe para observar un eclipse total del sol, un 29 de mayo de ese año, y sabía de la importancia de ese hecho para la famosa teoría de Einstein.

Y ¿por qué fue importante el eclipse para Eddington? porque era la única forma de medir uno de los efectos más curiosos de la relatividad general; “que una masa grande de materia curva la luz, por lo tanto, LA LUZ TAMBIÉN GRAVITA”. Tranquilos, si no lo entendieron ahora con tanta información y tecnología a la mano, hace un siglo la misma comunidad científica rechazaba esta afirmación.

Por eso, el fenómeno del eclipse total del sol de 1919 fue trascendental para Eddington y Einstein porque si se puede observar que la luz gravita, se estaría demostrando la teoría de la relatividad. Para ello se necesitaba una fuente de luz distante, por ejemplo, una estrella, y una masa grande cerca de la tierra, es decir, el sol. Bajo la acción gravitacional del sol, la luz de la estrella debería curvarse, modificando la posición donde la vemos en el firmamento.

Y claro, la pregunta del millón: ¿cómo se puede ver una estrella que está al lado del sol, peor aún, hace 100 años? Y sobre todo porque el sol con el brillo que tiene tapa todo a su alrededor, por eso durante el día no se pueden ver las estrellas. La solución: tapar el sol, lo que se conoce como un eclipse.

Einstein y Eddington lo sabían, por lo tanto, era el momento de poner a prueba la Relatividad. Es así como se lleva a cabo dos expediciones científicas, una en Brasil y la otra a la isla del Príncipe, en África. Esto fue una simple demostración del ingenio humano y de la importancia científica de los eclipses, es mucha y valiosa la información que se puede extraer de su observación. En el caso de la expedición de Eddington fue la validez de la Teoría de la Relatividad General NADA MÁS Y NADA MENOS.

Pasemos a lo que sucederá hoy, lunes 14 de diciembre 2020. El espectáculo empieza a la 13:33 UTC, 09:16 am en Perú, y tendrá su punto máximo a las 10:16 am, concluyendo a las 11:23 am. Se origina en algún lugar del Océano Pacífico y toca primero a Chile, luego Argentina, siguiendo su trayectoria hacia el Este, hasta llegar al sur de África.

Nuestra Sudamérica es la gran privilegiada no solo con la observación total del eclipse, sino con la vista parcial, como es el caso de Perú, Bolivia, Uruguay y Brasil. Y eso no es no todo, a diferencia de lo que ocurrió en otras oportunidades, este eclipse tendrá lugar en plena mañana, con el sol en pleno cielo, a plena luz del día, por lo que el contraste entre la luz y la sombra será mayor (tranquilos terraplanistas, no será el fin del mundo), y será de mayor duración DOS MINUTOS (claro, para los centenials eso es un chiste, pero para los astrofísicos eso es una “eternidad”).

Por lo tanto, además de su importancia científica, el eclipse total del sol es uno de los MAYORES ESPECTÁCULOS NATURALES que la humanidad puede observar. En primer lugar, SE “APAGA” EL SOL, se obscurece el cielo y en pleno día se puede ver las estrellas (tomen nota románticos no solo se puede prometer poner la luna a los pies de sus amadas).

Un eclipse total del sol también es fascinante porque se hace evidente que vivimos en una roca (la tierra) alrededor del sol, y surge entonces esa sensación indescriptible de conexión casi mística de unión o ser parte del cosmos. Y todo eso en un ambiente único, de comunidad no solo de científicos, astrónomos, físicos, astrofísicos, frikis, sino de gente común y corriente, todos emocionados ante una expresión maravillosa de nuestra naturaleza.

La historía de los eclipses ha sido tan intensa que distintas culturas han tomado este hecho natural como mal presagio. Si el astro rey se apaga ¿los reyes y reinados terrenales todo poderosos también pueden apagarse?. Así se narran curiosas anécdotas como el eclipse del 585 aC que encontró a los ejércitos Lidios y Medos en pleno enfrentamiento. La irrupción del eclipse hizo que ambos bandos  depusieran las armas y firmaran la paz después de más de 6 años de guerras (congresistas peruanos, por favor, presten atención).

Otro caso fue en el año 2136 aC en la lejana China. Un dragón hambriento intentaría comerse el sol provocando el caos en el pueblo y la ira del emperador; los astrónomos de la corte perdieron la cabeza por no haber podido predecir dicho acontecimiento, convirtiendo a estos hombres de ciencia en los primeros mártires del gremio.

En tiempos más modernos, un eclipse correctamente predicho en 1560 marcaría la vida de un tremendo astrónomo Thyco Brahe (no saben quién fue, busquen un google). Se cuenta también que en el 2019 durante el eclipse de verano de ese año, cantar el himno de Chile dio lugar a una pandemia.

Para los que se animen y claro está, puedan ir a un lugar privilegiado en el Perú o en cualquier otra parte de Sudamérica, a continuación consejos básicos y necesarios para hacerlo de la manera más efectiva y segura:

1 Encontrar un emplazamiento donde las condiciones climáticas sean de cielo despejado y sol radiante, así como buena altitud sobre el nivel del mar (sierra sur del Perú).

2) Utilizar protección en los ojos durante el proceso inicial del eclipse, claro, exceptuando cuando esté en el momento total. No hacerlo puede causar graves daños a la retina.

3) Y el último, y más importante de los consejos: NO CANTES EL HIMNO DE CHILE, ¡PO! (VADE RETRO SEGUNDA OLA COVID)

Así que, en medio de tanta oscuridad, aprovechemos este eclipse para relajarnos y hacer un viaje por el cosmos en este velero particular que llamamos TIERRA